Por Isabel Martínez Pita.- Los jardines de Europa muestran la belleza de la vegetación de cada lugar e historia de las civilizaciones que forman parte de esos países y dejaron su huella sobre las formas más lúdicas de vivir, entre los colores de las flores y el sonido de sus fuentes, y que ahora se recupera con viajes destinados a recorrerlos.
Licenciado en Derecho y en Historia del Arte, pero dedicado al mundo de los jardines, Somovilla explicó a EFE su trabajo dedicado a descubrir los recorridos que se pueden realizar a través de esos pequeños parques de distribuciones armónicas y agradables a la vista, y a penetrar en la cultura de las distintas civilizaciones que se han instalado en Europa y han dejado el legado de sus jardines y fuentes.
Extensiones verdes instaladas con el propósito de disfrutar de la belleza que la armonía de una combinación equilibrada entre plantas, flores y agua ejerce sobre el espíritu del paseante.

Ignacio Somovilla, en el jardín inglés de Biddulph Grange Garden, de Inglaterra.
Foto: cedida por Ignacio Somovilla
Del deseo y la pasión de Somovilla por los jardines surgió la iniciativa, en 1999, de crear una agencia, Bomarzo, viajesbomarzo@gmail.com, en la que se organizan viajes tanto a grandes jardines como a jardines privados en todo el continente europeo.
Y también Bomarzo se ha implicado en la incursión de jardines de otros países exóticos como son los que están instalados en India, Japón o Suráfrica, para conducir a los paseantes a adentrarse no solo en los paisajes que muestran la flora vegetal de esos lugares sino también en la historia y costumbres de esos países.
“Gestión cultural sobre el mundo del jardín”
“Mi trabajo consiste en organizar viajes por el mundo para ver jardines y, por otra parte, también corresponde a la gestión cultural sobre el mundo del jardín, como eje principal”, indicó este emprendedor.
La gestión cultural de Ignacio Somovilla consiste en organizar actividades culturales sobre los jardines en la sociedad contemporánea, “como cursos sobre la historia del jardín, ciclos de cine y jardín, exposiciones, conferencias, libros…”.
“Cada jardín tiene algo que contarnos dependiendo de la época del año, del tiempo o de su formación. Los que más gustan son, sobre todo, los jardines ingleses que se crearon desde el siglo XVIII, aunque también se encuentran los jardines renacentistas italianos o los franceses barrocos”, subrayó Somovilla.
Los huertos, jardines de moda
En la actualidad, para Ignacio Somovilla, “los jardines que más gustan son los pequeños, pero hay ciertas modas sobre el mundo de los huertos, donde la gente puede tener su terracita, su balcón o ventana en la que van formando ese mundo de plantas, al que ahora la gente está muy entregada”.

Pazo de Oca, situado en la Parroquia de Oca, perteneciente al municipio de La Estrada, provincia de Pontevedra.
También asistimos a una valoración del jardín mediterráneo que huye de la tiranía del jardín inglés, que son jardines bellísimos, pero que en gran parte de nuestro país no es fácil de mantener. Sin embargo, el jardín mediterráneo está muy vigente en la jardinería de hoy en día”.
En cuanto a catalogar los jardines más bellos, según Somovilla, “depende del entorno y dónde estén colocados. Básicamente, los romanos inventaron lo que se llama el ‘genius locus’, es decir, el genio del lugar o el espíritu del lugar, que consiste en preguntarle al sitio cuál es su necesidad física y fundamental”.
Para este especialista en arte, entre los jardines más bellos en España se encuentra el de L’ Albarda, en Valencia, situado entre las localidades de Denia y Javea; el pazo de Oca, en la parroquia de Oca, perteneciente al municipio de La Estrada, provincia de Pontevedra.
Lur, (luz en euskera), jardín privado ubicado en el País Vasco, que ha sido construido por los paisajistas vascos Iñigo Segurola y de Juan Iriarte.
La Granja, en Segovia; el Generalife en Granada, así como el jardín de la casa del pintor asturiano Evaristo Valle, en Gijón, creado por la sobrina del pintor y muerta en 1980. La Fundación Rodríguez Acosta, en Granada; el Botánico en Barcelona y el Romeral de San Marcos, en Segovia.
Y el paisajista español resalta la labor de la localidad orensana de Allariz, donde se celebra el único Festival de jardines de España.
De entre los jardines internacionales, el paisajista destacó los que se encuentran en las Islas Azores donde “hay unos jardines maravillosos porque son cambiantes dependiendo si los recorres por la mañana, por la tarde, al alba o cuando está anocheciendo, en invierno o cualquier otra estación del año. La naturaleza va cambiando y floreciendo constantemente. También incide tu estado anímico que si cambia crees que también el paisaje cambia”.

Fuente en el jardín de Rodriguez Acosta.
Foto cedida por Ignacio Somovilla
En cuanto al porcentaje de los turistas leales a los jardines, Somovilla consideró que “tenemos entre 400 y 500 clientes que les gusta adscribirse a estos viajes. Si te gusta la naturaleza, el arte y pasear lo tienes todo en estos viajes porque son expresiones de lo que hace la creatividad humana”. Efeverde